El factoring no es sólo una solución de financiamiento de último minuto. Es una herramienta que, bien utilizada, ayuda a optimizar la gestión del negocio en general.
Mediante el uso correcto de este instrumento, el cliente de factoring puede adoptar prácticas y hábitos que le permiten manejar mejor su caja y mejorar sus opciones de solicitud de financiamiento tanto en empresas de factoring, como leasing y entidades crediticias.
Para eso, primero el cliente debe calificar para recibir fondos del factoring. Y para lograrlo tiene que tener su información comercial y financiera al día y cumplir ciertos requisitos.
La siguiente guía ofrece orientación sobre cómo evaluar la empresa de factoring a contratar, como calificar para recibir este financiamiento, las razones por qué el factoring acepta o rechaza un cliente, y un caso de éxito de un emprendedor que supo sacarle el máximo provecho a su factoring.
Como dueño de una pequeña y mediana empresa (Pyme), cada segundo cuenta. Por eso necesitas conseguir financiamiento a corto plazo de forma rápida y eficiente.
Así, el factoring surge como alternativa viable para enfrentar situaciones que puedan afectar tu negocio, desde la falta de liquidez hasta la necesidad de ordenar las finanzas internas de la empresa. Sin embargo, no es es llegar y contratar este servicio.
El factoring es una alternativa ideal para tu empresa si tus clientes demoran 30 días o más en pagar tus cuentas por cobrar. También si tienes problemas para pagar a tiempo a tus proveedores o pagar los sueldos a fin de mes, o simplemente si necesitas organizar mejor tu flujo de caja y tener liquidez para cumplir con tus compromisos.
Independientemente del destino que des a estos dineros, contratar un servicio de factoring debe recibir los mismos cuidados y atención que pones para dirigir el negocio.
Estos son los 7 puntos que es crucial que consideres al momento de evaluar una empresa que entregue este tipo de financiamiento.
Tu negocio pertenece a una industria que tiene sus particularidades en cuanto a ritmos de trabajo, sistemas y tiempos de pago, estacionalidades y temporadas. Por eso la empresa de factoring que contrates debe tener conocimiento sobre tu rubro.
Es importante que consultes cuánta experiencia tiene con tu sector. En paralelo, te recomendamos que consultes a colegas del rubro si han trabajado antes con tal factoring y cómo fue el servicio entregado.
Idealmente, la empresa de servicio de factoring que elijas debe tener una cantidad mínima de años funcionando; entre 10 y 15 años es un buen período de tiempo. Si es un factoring que recién empieza, no tienes un punto de comparación para evaluar si el servicio es bueno, o si su respuesta es rápida y eficiente.
El factoring que elijas deberá ser claro en los gastos administrativos, comisiones, tasas de interés y otros cobros desde un principio. Si a medida que entrega el financiamiento te sorprende con nuevos montos, entonces su servicio es cuestionable.
Hoy en día, la industria de factoring chilena demora un rango de entre 12 y 24 horas en evaluar las operaciones. El tiempo específico es determinado por cada empresa, sin embargo tomar más de un día en analizar las facturas del cliente es visto como poco competitivo en el mercado.
Este punto está muy relacionado con la rapidez para aprobar las operaciones. Debes elegir un factoring que facilite todas las formas posibles de entregar el dinero que solicitas de forma expedita desde su aprobación. La manera más rápida es que sea por transferencia electrónica, evitando los vale vistas o cheques por cobrar en bancos.
Como dueño o administrador de la Pyme necesitas una atención post-venta que solucione reclamos o problemas, y que no te haga perder tiempo con nuevos conflictos. Por ende, averigua sobre la experiencia de clientes anteriores sobre este importante punto antes de decidir.
Sabes que estás contra el tiempo, por ende aceptar que la tasa de interés y comisiones que aplique la empresa de factoring sean un poco más caras no es tan determinante siempre que la velocidad en que puedan solucionar tu problema sea la que necesitas.
Pedir el crédito a un banco es muchas veces una alternativa de financiamiento inalcanzable para una Pyme. Por eso el factoring es una solución rápida y efectiva.
Sin embargo, como dueño o administrador de la empresa debes poner cuidado al momento de elegir el prestador del servicio en cuestión y evitar creer los mitos que rodean este tipo de negocio.
Dependiendo de tu necesidad o urgencia, variables como la rapidez en el curso de las operaciones, la transparencia en los cobros o los costos asociados pesarán más que otras. Por ende, siempre evalúa más de dos alternativas y compara estos siete puntos clave antes de tomar una decisión.
Si quieres optar por esta alternativa de financiamiento para tu negocio, debes prepararte para una evaluación previa.
¿Cómo demostrar que serás un buen cliente para la empresa de factoring? Acá te damos algunas claves.
¿Sabes cómo las pymes califican para ser clientes de un factoring? Primero, debes tener claro que no basta con que tu empresa tenga la intención de entrar a este sistema, sino que también debe ser atractiva y confiable para el factoring.
Para esto, aquí te damos algunos consejos para posicionar mejor a tu empresa para ser cliente de factoring:
1. Demostrar facturación continua y mantener el giro de la empresa
Todo se resume en tener “la casa ordenada”para inspirar confianza. Recuerda que en el factoring, el negocio es el siguiente: la empresa (Pyme) vende sus facturas a la empresa de factoring. El factoring le paga el dinero correspondiente a un porcentaje del monto de la factura y se hace cargo de la cobranza de esta. Así la pyme no debe esperar que le paguen sus facturas para tener liquidez.
Pero antes que esto ocurra, la empresa de factoring debe asegurarse de que no tendrá problemas para recibir el pago de los documentos. Es por esto que investigará todos los antecedentes que sean necesarios.
Una manera de entregar solidez es la relación financiera que tienes con tus clientes. ¿Tu pyme tiene clientes que facturen mes a mes? La habitualidad puede ser una gran punto a favor a la hora de una evaluación. Este aspecto demuestra que existe cierta estabilidad financiera y suma puntos de confianza.
Por otro lado, todos las variaciones que hagas en tus actividades comerciales deben ser informadas. Uno de los primeros pasos que evaluarán de tu empresa es el RUT. Por ejemplo, si piensas hacer algún cambio en el giro de tu empresa, ten en consideración dar aviso al factoring. Es muy importante que transparentes toda la información, ya que si se lleva sorpresas se perderá la confianza.
Existen estudios como el Informe Empresarial 360° que arroja una evaluación comercial de empresas y personas jurídicas que permite minimizar riesgos. Esta herramienta ofrece un conocimiento profundo sobre un posible cliente o proveedor. Gracias a éste, quien analiza a una empresa puede obtener información de comportamiento de pago, un reporte del nivel de facturación, un reporte societario (una malla societaria que permite saber quiénes son los socios de la empresa y las sociedades con las que ésta cuenta), información de cargos, etc..
Por lo tanto, lo mejor es que tengas clara la situación en que está tu empresa respecto de la deudas.
Para eso, debes ser capaz de responder preguntas como ¿Pediste algún crédito para tu empresa? ¿Sabes qué deudas están al día, morosas y vencidas? ¿Tienes los números que demuestran tu nivel de ventas? ¿Has pagado el IVA? ¿Has pagado las imposiciones de tus trabajadores? Esto te ayudará a mostrar la solvencia que tiene tu empresa.
Las empresas de factoring suelen pedir el historial de pago de los clientes porque sólo toman cuentas por cobrar que sean aceptables para sus criterios. Por lo general, las empresas de factoring tienen la libertad de filtrar las operaciones que están dispuestas a aprobar. Así pasa con la mayoría de los acuerdos de este tipo de financiamiento.
¿Tienes claras todas las obligaciones tributarias que tiene tu pyme? Estas pueden ir desde la declaración de renta al pago de Impuestos al Valor Agregado (IVA).
Estar al día con los impuestos suma puntos en esta evaluación.
Formar una pyme requiere de más obligaciones que sólo vender tu producto o servicio. Por lo general estas tareas administrativas y contables consumen tiempo valioso y probablemente es algo que no tenías tan claro antes de formar tu negocio.
Una de las principales misiones que tienes como dueño o administrador del negocio es llevar el orden de todos los movimientos financieros, saber claramente cuánto dinero entra y sale de la empresa.
Para optar por el factoring, debes partir por hacer una evaluación comercial interna. Para ello, debes dominar desde el nivel de ventas hasta el estado de tu situación tributaria. Para algunas empresas de factoring no es relevante que tu empresa (la pyme) esté en Dicom pero si es muy importante el que tengas buenos clientes.
Asegúrate de contar con toda la información necesaria para que puedas acceder a esta alternativa de financiamiento para optimizar la gestión financiera de tu negocio.
El factoring no solo sirve para proveer liquidez. Si es bien usado se convierte en una herramienta de financiamiento eficiente para mejorar la gestión financiera de tu empresa.
Una de las gracias del factoring es que no constituye deuda en el sistema financiero.
Por lo mismo es una herramienta útil para lograr objetivos administrativos y contables propios de la gestión de toda empresa, como por ejemplo:
Ahora bien, para sacarle el máximo partido posible al factoring como herramienta de apoyo a la gestión de tu empresa, es bueno que adoptes estas dos buenas prácticas:
Incluye el factoring en tu presupuesto operativo. Cotiza constantemente y considera este servicio como gasto operativo que debes incluir en tu estructura de costos.
Es importante que la empresa considere el costo del factoring formalmente como un gasto más. Si bien es para obtener financiamiento, conlleva el pago de un precio e intereses que deben ser costeados con la misma caja que la compañía trata de mantener estable.
Según explica la Bolsa de Productos de Chile, el registro del factoring en la contabilidad de la empresa depende de dos situaciones:
Esta práctica está muy relacionada con la primera. Con o sin factoring, para que la caja se mantenga estable, la Pyme debe planificar previamente sus ingresos y egresos para el período en cuestión.
Esto se hace en base a información que es posible de predecir, como nóminas de sueldos, gastos operacionales fijos, contratos con clientes preestablecidos, pago a proveedores, etc.
Tener este análisis preliminar le permite a la Pyme reconocer si su saldo al final del período será positivo (ingresos superan a los egresos) o negativo (egresos superan a los ingresos). En consecuencia, puede asignar recursos disponibles o planificar los montos que faltan, por ejemplo, operando con factoring.
Tu negocio puede sacarle partido al alivio y al orden que el servicio de factoring ofrece a la administración de todo tipo de negocio.
Las Pymes en particular pueden aprovechar el funcionamiento del factoring como herramienta de manejo de liquidez, ya que les permite gestionar mejor su capital disponible, aumentar la velocidad de pago de cuentas por cobrar y optimizar el ciclo de efectivo disponible.
En el entorno actual, la mayoría de las ventas comerciales implican condiciones de pago. Los términos de éstas pueden dar a sus clientes hasta 120 días para pagar una factura.
Si en el caso de tu negocio necesitas liquidez inmediata por el motivo que sea, apóyate en mecanismos de gestión y financiamiento que contribuyan a mantener tus finanzas ordenadas, con capacidad para responder a tus compromisos y con liquidez a mano.
Factoring es una forma de financiación que ayuda a las empresas con problemas de flujo de caja o necesidades de mayor liquidez.
Sin embargo, no cualquier empresa puede estar calificada para acceder a esta alternativa de financiamiento. La empresa de factoring cuenta con un checklist con todas las etapas de evaluación que el negocio deberá cumplir antes aprobar una operación.
La industria del factoring funciona hace bastantes años en Chile, basándose en la Ley 19.983 creada en 2004. Esta ley detalla todas las herramientas para la correcta operación de facturas, al delimitar de manera más clara las obligaciones que tienen quienes dan y reciben una factura de venta, y qué atributos tienen las empresas de factoring, así como el rol de intermediarios de éstas.
Sin embargo, para que tu empresa pueda acceder a esta alternativa de financiamiento, debe cumplir con al menos estos seis requisitos:
1. Ser una empresa o persona natural con giro.
2. Antigüedad: La empresa o persona natural con giro debe operar al menos por un año, corroborado mediante facturación pagada y aceptada por el Servicio de Impuestos Internos (SII).
3. Presentar información financiera actualizada: documentos tales como Balances, Carpeta Tributaria e Informes Comerciales. Contar con esta información ofrece una oportunidad a las empresas para mejorar su acceso al mercado de Capitales.
4. Presentar tu Carpeta Tributaria: esto quiere decir, que la empresa debe poseer al menos una declaración de impuestos a la renta pagada y aceptada por el SII. La Carpeta Tributaria Electrónica permitirá entregar la información tributaria de un contribuyente a un tercero autorizado, con el objeto de solicitar créditos bancarios, financiamiento de factoring y acreditar rentas, entre otras.
5. Entrega de información Legal (Escrituras de constitución y poderes de administración): es el acto de los fundadores de la empresa que procede a la firma de la Escritura de constitución ante notario, y aprobación de los Estatutos de la sociedad, debiendo adjuntarse en este momento la certificación del Registro Civil. Una vez otorgada la Escritura, el notario dará cuenta al Registro Civil de este hecho, quedando el nombre de la sociedad inscrito en el mismo.
6. Nivel de Clientes: Es muy importante para calificar a una empresa de factoring el tamaño que tengan tus clientes, esto se refiere al nivel de venta de la empresa, los años de operación, el historial de pago y su situación financiera y tributaria.
7. Derechos de retención: un detalle importante que no puedes dejar pasar, es que las facturas de tu negocio deben estar libres de derechos de retención, y además de esto llevar un control de calidad del producto o servicio que ofrece.
Es muy importante que antes de solicitar el apoyo de un factoring tengas claridad de todos los documentos lo que debes presentar, y recuerda evaluar bien qué tipo de empresa de factoring te conviene más.
Una vez que cumplas con estos requisitos serás una empresa que tendrá muchas posibilidades de calificar a una empresa de factoring y acceder así a los beneficios que este tipo de financiamiento otorga.
El factoring es una modalidad de financiamiento pensada para las Pymes. Pero no por eso es llegar y llevar.
¿Quieres saber cómo lograr que tu negocio califique para este financiamiento? Las empresas de factoring evalúan a sus clientes con cuidado y atención.
Por eso compartimos las principales recomendaciones que las empresas de factoring hacen a sus clientes para que pasen el proceso de evaluación de riesgo y de este modo puedan recibir financiamiento mediante el factoring tradicional, o venta de facturas.
1. Es crucial que tengas la documentación de la empresa al día. Toda ausencia de datos o contenido que genere desconfianza resta puntos a tu solicitud.
2. Situación tributaria al día. Tu Pyme debe tener la información tributaria al día y actualizada ante el Servicio de Impuestos Internos (SII).
3. Transparencia de información. Los datos de tu negocio deben estar actualizados y disponibles, desde la escritura pública hasta modificaciones a la sociedad, el número de socios, balance general, etc. Mientras más información real y fidedigna tenga el factoring sobre tu Pyme, mejor.
4. Información de clientes actualizada. Además de los datos propios de la empresa, es importante que la Pyme ponga a disposición información relevante de sus clientes, como datos de contacto, RUT, direcciones, representante legal, etc. Así el factoring gana tiempo en la evaluación.
5. Facturas y clientes de calidad. Para toda empresa de factoring es importante la calidad de clientes deudores que tiene la Pyme. Si estos cuentan con buenos niveles de ventas e historiales de pago, así como habitualidad en los trabajos que realizan con la Pyme, es más factible que califique y sea evaluada positivamente.
6. Estar o no en Dicom. Hay empresas de factoring que consideran relevante si la Pyme está en este listado de deudores, mientras que otras no.
7. Tiempo de facturación. La mayoría de las empresas de factoring solicitan que el negocio tenga un año de facturación contínua o continuidad de giro por ese período. Pero ciertamente hay excepciones que son consideradas, como que la Pyme aunque lleve operando menos de un año preste servicios para un cliente “Gran Empresa”, o bien tenga clientes pequeños pero facturen montos altos.
8. Obligaciones laborales al día. Otro punto importante es que la empresa tenga sus pagos previsionales al día (como imposiciones y bonificaciones acordadas según contrato, etc).
Además de vender, debes preocuparte de mantener las finanzas de tu negocio en orden, con información transparente, ordenada y al día, obligaciones cumplidas y documentación que acredite la seriedad de tu Pyme.
Todo esto contribuye a que tu negocio califique mejor para que la empresa de factoring acepte darle financiamiento.
El factoring es una alternativa de financiamiento pensada para las Pymes. Otorga valor a un documento tan simple como la factura, la cual es “vendida” por un monto similar al valor de la cuenta por pagar.
Pero aún así, algunas pequeñas y medianas empresas no logran calificar para recibir estos fondos.
Cada empresa de factoring en Chile funciona con sus propios procedimientos de análisis de riesgo. A continuación, te explicamos las razones más comunes de por qué niegan la solicitud a Pymes que requieren estos fondos por falta de liquidez:
No se trata de mala suerte. Ni tampoco de mala disposición Simplemente, cuando una empresa de factoring rechaza la solicitud de una Pyme es porque durante el proceso de evaluación de riesgo de su petición uno de estos factores generó una alerta.
Por ende, debes preocuparte de mantener las finanzas de tu negocio en orden, con información transparente, ordenada y al día, obligaciones cumplidas y documentación que acredite la seriedad de tu Pyme.
El negocio de High Servicios Tecnológicos yace en las alturas.
Este emprendimiento chileno, ubicado en el norte del país, provee servicios de asesorías en Tecnologías de la Información (TI) y grabaciones aéreas con drones para estudios topográficos, control de gran infraestructura, medición de volúmenes, avance de obras, ortofotografía georreferenciada, y videos en 4K para clientes industriales.
Sin embargo, un problema terrenal puso en aprietos la liquidez de la empresa hacia fines de 2017, y complicó el despegue de sus finanzas.
Cuando un cliente se atrasó con el pago de una factura en noviembre de 2017, la administración de High inmediatamente hizo sonar la alarma.
La experiencia le había enseñando a estas empresas (Pyme) que mientras más compromisos se atrasen en sus pagos es más difícil poder solucionar el problema, en especial si son montos elevados..
Y se trataba de un contrato grande.
Después de tres meses de facturas impagas, el flujo de caja pedía ayuda. High todavía contaba con liquidez, pero quería evitar descapitalizarse del todo. Además, debía cumplir con sus obligaciones contractuales con otros clientes, atraer nuevas ventas, pagar a sus proveedores y estar al día con el IVA mensual.
Pese al retraso, durante ese período High cuidó la relación con el cliente que no pagaba. Tenía que mantener ese contrato, no podía perderlo.
Ciertamente este no es un caso aislado; es un problema común que todas las Pymes en Chile enfrentan, una realidad que cada emprendimiento trata de solucionar a su manera.
High tenía pocas alternativas para solucionar este problema. En la época que la empresa comenzó a buscar opciones, pedir un crédito comercial al banco o integrar un nuevo socio capitalista estaban fuera de la ecuación.
Endeudarse a largo plazo era incómodo y costoso, mientras que incorporar a un nuevo socio no estaba en los planes de la empresa.
Pero el dinero tenía que salir de algún lado y no había mucho tiempo.
Fue así como el dueño se informó sobre el tema y tuvo claro desde el principio que, como en todo negocio, el factoring obtiene utilidades mediante comisiones e intereses. Por ende, buscó la mayor transparencia posible respecto a estos cobros.
Durante una semana, el gerente general de High Servicios Tecnológicos cotizó empresas de factoring y llegó a Logros gracias a referencias de confianza.
High eligió Logros Factoring por su celeridad, principalmente. Necesitaba recibir respuesta inmediata e información lo más clara y precisa posible.
Consciente del costo de oportunidad de vender su factura a una empresa de factoring, para su dueño el precio no fue lo más relevante para tomar su decisión, sino la agilidad con que Logros Factoring podía atender su problema.
Fue así como Logros compró la factura impaga, entregó el dinero correspondiente a High menos una comisión. Asimismo, realizó las gestiones de cobranza directamente con el cliente para conseguir el pago del monto adeudado.
“En mi decisión primaron la claridad de las comisiones que cobran y la rapidez con que se hizo todo. Prioricé mucho lo que fue la atención”.
- Gustavo Finch, fundador de High Servicios Tecnológicos.
La solución de financiamiento entregada por Logros tuvo tres consecuencias positivas directas para High:
Casi un año después, High continúa trabajando codo a codo con Logros. Su dueño prefiere seguir con esta empresa aunque recibe ofertas de otros factoring constantemente.
Para High, la alternativa del factoring como fuente de financiamiento es útil y efectiva. También tiene dos efectos directamente beneficiosos para el negocio:
“El factoring es una ayuda para no traspasar tu problema de liquidez a tu cliente. Es un intermediario que te da una mano para no perder al cliente. Me soluciona el problema”.
- Gustavo Finch, dueño de High Servicios Tecnológicos.
En un comienzo la relación fue comercial; había que salir del problema de falta de liquidez cuanto antes para lograr responder a los compromisos asumidos por la empresa.
No obstante, hoy se trata de una relación de confianza, basada en la transparencia y la atención que entrega Logros Factoring y el cuidado que High pone en la calidad de sus facturas que vende a Logros.
En particular, su dueño destaca los siguientes atributos:
“Ellos solucionaron el problema cuando más lo necesitaba. Y eso es para mí muy importante. Logros se preocupa por eso los recomiendo”.
- Gustavo Finch, fundador High Servicios Tecnológicos.
El factoring surgió como una alternativa de financiamiento para pequeñas y medianas empresas originalmente. Hoy, empresas de todos los tamaños ocupan esta herramienta para financiar liquidez.
También hay negocios que aprovechan las buenas prácticas que conlleva ocupar factoring, como adelantar cuentas por cobrar, preparar las facturas con anticipación, y facilitar el pago de las deudas de clientes morosos o malos pagadores.
Estos hábitos ayudan al negocio ordenar su gestión financiera y facilita la reacción ante contingencias o imprevistos relacionados a la cobranza de sus facturas.