Probablemente muchos emprendedores y dueños de empresas o negocios hemos pasado por la etapa en que se debe fijar el precio de un producto o servicio. Esta deficición puede traer ganancias o pérdidas dependiendo si lo hicimos bien o no, y el problema es que muchas veces no sabemos como lo hicimos hasta que es muy tarde.
Si no tienes claridad de cómo fijar el precio correcto de lo que estás vendiendo, o no estás seguro si se determinó bien, en este blog te daremos las directrices para que costear tu producto o servicio no sea un mayor problema.
Si eres empresario, manejas un negocio o estas emprendiendo es muy probable que en el camino que recorriste te hayas topado con ciertas dificultades y una de ellas sea ¿Cómo determino el precio de mi producto o servicio?
Para que tu empresa entre a competir con fuerza en el mercado, debes tener una estrategia de fijación de precios y responder a dos preguntas:
-¿Cuál es el costo de producción de mi producto?
-¿Cuánto quiero ganar con él?
Según la teoría de los precios de Milton Friedman, Premio Nobel de Economía en 1976, existe una simple fórmula para calcular los costos de lo que estamos vendiendo:
-La suma total de los costos fijos y variables / La producción total estimada = Costo por unidad.
Para esto, es muy importante que tengas claros los costos de fabricación, que pueden ser fijos o variables.
Te daremos 5 pasos fundamentales que debes seguir para fijar el precio correcto de lo que estás vendiendo.
1. Intenta darle un valor agregado a tu producto
Esto te permitirá, además de diferenciarte de la competencia, darle un mayor valor : Debes enfocarte en encontrar la manera de darle un valor adicional a tu producto.
Identifica el valor agregado del producto pensando qué lo hace realmente único y por qué la gente lo elegiría por sobre el resto.
2. Estudia a la competencia
No existe un mercado que no tenga competencia. Por eso es muy importante que analices el precio que ofrecen tus competidores.
3. Define tu producto, ¿es simple o complejo?
El precio de tu producto o servicio está directamente determinado a su vida útil. Uno no duradero es aquel que llega a cumplir una necesidad básica y que se consume, termina o expira de manera rápida, por lo que su precio debe ser más bajo que el de uno que dura más.
4. Establece costos fijos y variables
Es importante que identifiques y definas los costos fijos que tendrás que cubrir todos los meses, por ejemplo: luz eléctrica, teléfono, sueldos, arriendos, movilización o maquinaria.
Por otro lado, identifica cuáles serán los costos variables, aquellos que están directamente relacionados con la cantidad de producción.
Por ejemplo las materias primas; cuando aumenta el nivel de producción, también lo hace el costo de los materiales.
La mano de obra también es un costo variable, ya que a medida que crece el negocio, necesitarás a más personas trabajando contigo (lo mismo pasa si se disminuyen considerablemente las ventas)
5. Define el porcentaje de utilidad que esperas recibir
Cuando ya pasaste la etapa de identificar costos de producción, lo que viene es más fácil: ¿Cuánto quieres ganar o cuánto crees que vale tu producto? Es recomendable trabajar con porcentajes, por ejemplo: Espero lograr un margen de utilidad del 30% por producto u hora de servicio.
Conclusión
Aunque tu proyecto, emprendimiento o negocio sea increíble y muy innovador, si no sabes cobrar correctamente por lo que estás entregando, es probable que en un corto periodo de tiempo te veas en problemas.
Por lo mismo es importante que al momento de fijar los precios, seas muy conciente de lo que estás haciendo. Con tus precios atraerás clientes, te crearás una reputación y generarás utilidades.
Si tienes problemas con los números, puedes contratar a un experto para que maneje de manera correcta los precios de tus servicios y/o productos.
Aprende mas con la guía Flujo de caja para empresa mediana.