Evita pensar que tener dinero en efectivo en la caja chica es suficiente para tener liquidez. Considéralo de este modo: si la cantidad de efectivo sigue constante, pero las obligaciones del negocio aumentan, evidentemente ese dinero será un recurso escaso.
Por lo mismo, incluye en tu planificación financiera y productiva una estrategia que logre balancear lo que ingresa y sale de tu negocio.
El factoring es una alternativa de financiamiento que te ayuda en ese acto de equilibrio. Junto a otras buenas prácticas, como organizar pagos obligatorios y definir costos fijos, solicitar anticipos al momento de facturar un producto y recompensar a los clientes por pronto pago, son herramientas eficientes para ordenar tu liquidez.
En esta guía te explicamos las formas cómo el factoring ayuda a tu pyme a salir de sus problemas de caja y a mantenerse lejos de ellos.
Tener el financiamiento de la operación de tu negocio bajo control no es una tarea sencilla. Un descuido o un obstáculo, como la demora en pago de cuentas por cobrar, provoca fácilmente una crisis de flujo de caja si trabajas siempre al límite de tus ingresos.
Esta falta de liquidez complica el pago de aquellos gastos obligatorios y costos claves para el funcionamiento de la empresa. El factoring te ayuda a enfrentar esta emergencia, prever una nueva, incluso evitarla si lo planificas así.
Es importante que entiendas que generalmente funciona muy bien para empresas de rápido crecimiento que tienen una emergencia temporal de liquidez porque cometen las típicas malas prácticas que drenan hasta la caja más saludable.
El factoring ayuda, entonces, a salir de este problema entregando dos soluciones rápidas:
Si tu empresa y la factura pasan la evaluación de riesgo, y la empresa de factoring acepta comprarla, habitualmente demorará entre 12 horas y 24 horas en transferirte el dinero; los tiempos varían según la compañía donde contrates este servicio.
Al momento que ya tienes el dinero, está en tus manos evaluar qué gastos operacionales, no operacionales y variables costear primero. Recuerda que como empresa tienes obligaciones legales como cotizaciones previsionales, sueldos e impuestos, y deudas crediticias.
A veces, la emergencia de liquidez no sólo es responsabilidad de los clientes que no pagan. Posiblemente, el área en tu pyme a cargo de cobrar la factura simplemente no lo hace bien.
Este problema de cobranza genera otro conflicto aún mayor: una mala relación con el cliente, que contribuye a la desconfianza y quizás a futuros nuevos retrasos en el pago.
Es decir, todo el trabajo que hizo el equipo de ventas para concretar un negocio está amenazado por una gestión comercial deficiente posterior a la venta.
Con el factoring, traspasas la cobranza a manos expertas. La empresa de factoring, ya sea directamente, o mediante una empresa de cobranza, toma las riendas y gestiona el cobro de manera responsable.
La participación de un tercero en la cobranza quita presión a las tensiones con el cliente, y ayuda a que te enfoques en recuperar esa relación.
Cuando los clientes demoran en pagar las facturas, las pymes se ven obligadas muchas veces a solicitar financiamiento externo y salir de esta emergencia de liquidez. Por lo general, optan entre un crédito bancario y el factoring.
Crédito Bancario | Factoring |
Es una forma de financiamiento otorgada por los bancos a empresas de todos los tamaños. Si bien es un acuerdo que se define como un voto de confianza entre el banco y el solicitante, el cliente siempre debe demostrar solvencia económica y capacidad de pago, acreditando que sus ingresos son suficientes. Como define el portal web Banca Fácil, “estos créditos son montos de dinero para satisfacer necesidades de capital de trabajo, adquisición de bienes, pago de servicios orientados a la operación de la misma o para refinanciar pasivos con otras instituciones y proveedores de corto plazo y que normalmente son pactados para ser pagado en el corto o mediano plazo”. No obstante, si acudes a este préstamo para cubrir problemas de liquidez, podría resultar poco ventajoso por las razones siguientes: Es un proceso que demora un tiempo de aprobación de parte de la entidad bancaria. Si pagas tu crédito antes de la fecha de vencimiento pactada con el banco, debes costear intereses y una comisión de prepago, informa BancaFácil. Sin embargo, no puedes acceder al crédito si cuentas con antecedentes comerciales en Dicom. |
Este tipo de financiamiento es ideal para las pymes y empresas más grandes que necesitan tener liquidez de forma fácil y rápida. Al contratar los servicios de factoring, no solo recibes un monto inmediato, sino que también te olvidas de la tediosa tarea de tener que hacer las cobranzas cada mes a tus clientes. ¿Por qué? Porque al ser un servicio completo, trabajas con expertos en cobranzas que se encargan de mantener la comunicación y gestionar los pagos de las facturas de los clientes deudores. En este punto toma relevancia el hecho de mantener una buena relación con los clientes y proveedores, ya que si bien pueden ser ellos quienes tardan en pagar las facturas, también podría tratarse de un el problema del área de cobranzas de tu empresa al no hacer el trabajo correctamente. |
Entre las ventajas de solicitar liquidez por medio del factoring destacan:
Efectivo de forma inmediata: al presentar tu caso a la empresa factoring, y una vez que la solicitud es aprobada si cumples con todos los requisitos, por lo general la compañía de factoring tarda en promedio entre 12 horas y 24 horas en transferir el dinero, dependiendo de las condiciones de la empresa donde contratas el servicio.
Externalización de los cobros: el factoring también entrega como servicio la gestión del cobro de las facturas de manera responsable. Es decir, el cliente se olvida de la tarea de destinar su tiempo y recursos a este tipo de operaciones, y por lo tanto, puede dedicar sus esfuerzos al core business del negocio: crecer.
Mantener una buena relación con el cliente: delegar la cobranza al factoring puede ayudar a evitar caer en una mala relación con el cliente, o nueva desconfianza por nuevos retrasos futuros en el pago de las facturas.
No hay deudas: a diferencia de un crédito bancario, el financiamiento que entrega el factoring no limita el acceso al sistema financiero ya que no se registra como deuda.
A su vez, la empresa de factoring cobra una comisión a cambio de entregar el dinero de la factura de forma anticipada.
Por lo mismo, es importante que revises cuáles son las necesidades de tu negocio y de tus posibilidades económicas para optar por este financiamiento, entre otros aspectos claves para elegir la empresa de factoring que más te conviene.
Aunque brinda múltiples beneficios para hacer frente a las necesidades financieras de las pymes, el factoring también implica riesgos, los cuales puedes evitar teniendo un mejor entendimiento sobre este instrumento y sus ventajas.
Aunque es uno de los recursos más utilizados del mercado financiero, como afirma el portal Bolsa de Productos, aún hay muchos dueños de pymes como tú que se preguntan: ¿por qué debo contratar factoring?
Ante esta duda, debes saber que, debido a sus características, se trata de un financiamiento enfocado en apoyar a pequeñas y medianas empresas como la tuya, a través de las ventajas financieras y administrativas que a continuación te explicamos.
A diferencia de los bancos, donde la solicitud del financiamiento puede tardar más tiempo en ser aceptada, muchas empresas de factoring lo otorgan de manera casi inmediata, ya que este instrumento financiero está respaldado únicamente por tus facturas y no requiere un proceso para revisar el comportamiento financiero de la pyme.
De esta forma, el factoring te permite tener la liquidez en el momento en que emites tu factura, si así lo requieres. Así no tendrás que esperar a que se cumpla el proceso y plazo de pago de tus clientes para obtener el dinero que necesitas.
Al ceder tus facturas a la empresa de factoring, delegas las tareas administrativas relacionadas con el cobro de las mismas, lo cual te permite redestinar los recursos que empleabas en la gestión de cobranza en actividades que impactan directamente en el crecimiento de tu pyme.
Sin embargo, debes saber que, aunque la empresa de factoring es la responsable de cobrar las facturas que proporcionaste, no siempre asume el riesgo de impago, pues esto depende del tipo de instrumento al que recurres:
Factoring con responsabilidad: con este corres el riesgo de tener que hacer frente al impago de las facturas por parte de tu deudor e incluso, terminar perdiendo más dinero de lo obtenido con este instrumento.
Factoring sin responsabilidad: contrario al anterior, con este tipo de factoring no tienes riesgo de impago de las facturas cedidas, por lo que la empresa que contrates no podrá solicitarte el pago de la deuda correspondiente.
El factoring no genera ningún tipo de deuda con la empresa que contrates, explica el blog financiero Alter Finance, ya que el contrato únicamente supone un intercambio de cobro, por lo que no tendrás inconvenientes para solicitar un préstamo en el futuro, si así lo decides.
Ahora bien, como en todo, existen aspectos en contra que debes considerar y poner en una balanza para determinar si esta es tu mejor opción para obtener el financiamiento que necesitas para tu pyme.
Aunque es un servicio al que accedes relativamente fácil, no todas las Empresas de
Servicios Financieros cobran lo mismo, siempre dependerá del riesgo que implique
la operación.
Algunos costos que tiene una operación de factoring son:
Ya que el factoring es dinero adelantado, es fundamental que lleves una buena administración, de tal forma que logres cubrir todos los gastos contemplados durante un periodo.
Si utilizas todo en el momento en que lo recibes, lo más probable es que no tengas suficiente liquidez para solventar las obligaciones que se presenten más adelante.
Dado que el factoring implica dejar en manos de una empresa externa la relación con tus clientes -al menos en lo
que respecta a la cobranza-, corres el riesgo de que piensen que las finanzas de tu empresa están en problemas.
Por ello, el uso del factoring es más recomendable en empresas que venden productos de margen alto, es decir, aquellas donde el costo y precio de venta registran una diferencia importante que incluya los gastos que genera este financiamiento.
Ahora que conoces las ventajas y desventajas del factoring, es momento de que evalúes ambas caras de este servicio y las utilices a tu favor para obtener la liquidez que necesitas para tu pyme.