Esta es una pregunta difícil de abordar y recurrente a esta altura del año.A partir de la práctica tributaria y el estudio de los cambios legales de estos últimos años, podemos señalar a ciencia cierta que nuestro sistema tributario se está volviendo cada día más complejo, ya sea por los constantes cambios que ha enfrentado o por la cantidad de variables o reglas que deben abordarse para tomar una adecuada decisión tributaria. Desde la perspectiva del contribuyente, estos cambios solo han incrementado los costos de cumplimiento, la incerteza normativa y por ende, que la probabilidad de errores en la declaración de impuestos aumente.Para abordar este desafío, en particular desde la perspectiva de la Operación Renta, debemos tener especial cuidado en la correcta implementación de las reglas que se incorporaron en el régimen transitorio vigente para los años comerciales 2015 a 2016 (dígase cambios en los registros de control de utilidades tributarias, orden de imputación, control de retiros en exceso, reglas de reinversión, imputación de pérdidas, etc.)Desde el punto de vista del proceso de impugnación masivo de las declaraciones presentadas, debemos recordar que un grupo relevante de las denominadas observaciones (que pueden impugnar mi declaración de impuestos) proviene de simples cruces de información entre los datos propios o los de terceros. Estos datos no fueron creados por el SII, provienen principalmente de las declaraciones juradas propias o de terceros (esta información se encuentra a disposición en el sitio del SII para su verificación con la declaración anual). En esta línea, siendo un error muy recurrente, la recomendación es simple, verificar que la información disponible (previo al envío de la declaración anual) es consistente con las declaraciones presentadas y con las otras declaraciones de impuestos mensuales que impactan la Operación Renta (Formulario 50, 29, etc.).
Otro foco relevante de impugnaciones del SII se puede caracterizar al analizar las estadísticas históricas de observados. En esta línea, las probabilidades de
ser seleccionado para una fiscalización incrementan sustancialmente en aquellas declaraciones que presentan solicitudes de devoluciones relevantes, ya sea por absorción de pérdidas tributarias o excesos de pagos provisionales. En estos escenarios, nuestra recomendación es ordenar la casa y la documentación para abordar de forma exitosa el proceso de fiscalización que se iniciará a principios de junio.
Por último, debemos conocer cuáles son las nuevas declaraciones juradas que deben presentarse este año y qué modificaciones han sido incorporadas en el formulario anual, ellas nos permitirán identificar cuáles son las áreas de interés que la autoridad fiscal desea abordar este año fiscal. La modificación de las declaraciones juradas de grandes empresas (sobre datos de balance, diferencias de impuestos y determinación del resultados tributarios), la incorporación de la declaración jurada del FUT y de caracterización de contribuyente, a partir de nuestra experiencia, serán empleadas para detectar focos de riesgo o incumplimiento. Desde el punto de vista del Formulario 22, la incorporación de nuevos códigos para el control de las donaciones, los gastos de supermercado, el Goodwill, las operaciones de leasing , el gasto por impuesto, permitirán identificar en qué áreas debemos prestar especial atención para evitar inconsistencias en la información presentada.